‘FUERZA Y HONOR’, UN MENSAJE GRABADO EN LA PIEL Y LA FELICITACIÓN MÁS EMOCIONANTE DEL OSASUNISTA JUAN CRUZ PARA SU PADRE

• El futbolista, de la mano de Kosner, patrocinador oficial del club rojillo, ha rendido homenaje a una figura clave en su carrera para celebrar el Día del Padre
• “Ahora puedo sentir lo que uno siente cuando ve a sus hijos conseguir sus metas. Lo que hemos conseguido, lo hemos conseguido juntos”, explica el jugador de Osasuna, recordando su infancia junto a su progenitor

Con un balón de plástico y una camiseta de su equipo favorito. Así empieza la historia de amor entre muchos futbolistas y su profesión. Y hay casos en los que la figura del padre juega un papel fundamental en el surgimiento de esa relación tan íntima. Es el caso de Juan Cruz, jugador de Osasuna que, de la mano de Kosner, patrocinador principal del club rojillo, ha recibido la sorpresa de la visita de su padre en El Sadar. Un emocionante encuentro con motivo de la celebración del Día del Padre que ha servido al futbolista para recordar sus inicios y cómo era la especial relación con su padre cuando solo empezaba a darle patadas al balón.

“Mi padre es un apasionado de este deporte, le encanta, y siempre recordaré un balón de gomaespuma que me regalaron prácticamente siendo un bebé”, explica Cruz, que recuerda emocionado el ritual con el que acudían juntos a cada partido: “Nosotros teníamos un ritual. Siempre que me llevaba a un partido teníamos nuestra música,  ‘Abre la puerta’, del grupo Triana. Y cuando me despedía de él, me decía una frase que tengo tatuada: ‘Fuerza y honor’, como los gladiadores cuando se despedían. Y me emociono al recordarlo”.

Una relación que tuvo un momento crucial para la carrera del jugador: su fichaje por el Bolonia de Italia. “Saliendo del entrenamiento nos llega la propuesta de un contrato profesional de un club de Italia. Ya significaba poder vivir de esto. Y recuerdo perfectamente la frase de mi padre de: ‘Lo firmamos todo, no digas nada en casa, a tu madre ni mú’”.

Ahora, con la perspectiva del tiempo y con lágrimas de emoción en los ojos, Cruz se sincera en presencia de su padre con una felicitación muy especial:  “Él ya sabe lo que pienso de él. Le puedo decir Feliz Día del Padre. Ahora puedo sentir lo que uno siente cuando ve a sus hijos conseguir sus metas. Lo que hemos conseguido, lo hemos conseguido juntos”, afirma.

El otro protagonista de esta historia, Juan Cruz Álvaro, padre de Juan Cruz, confiesa su admiración por su hijo al mismo tiempo que aprovecha para lanzar un consejo a todos esos padres que cada fin de semana ven a los más pequeños crecer al lado de un balón: “La mayoría no jugarán en Primera, ya ganarse la vida con el fútbol sería un éxito. Pero a los niños lo que hay que dejarles es disfrutar”, señala. En esa misma línea se expresa Juan Cruz, que ahora, ya como padre de dos pequeños, ve ese fútbol como un momento de diversión y disfrute: “A los niños se les exige un nivel de profesionalidad que no es necesario. Lo más importante es que disfruten. Si a mis hijos les gusta este deporte, estaremos orgullosos. Si no, sé que conseguirán lo que quieran y estaremos para ayudarles”, concluye.